Deslumbrar, deslumbrarte, dejarte deslumbrar. CORRUBEDO, 101 motivos.

La magia de la luz, una y otra vez se nos hurta. Los semáforos, luces ruidosas. Los neones, luces absurdas y obscenas. Los coches, luces hirientes y molestas.

Recupero la magia de la luz y dejo que me deslumbre el reflejo agreste del sol candoroso sobre el océano agitado: ¡luz de vida!

Vente, obsérvalo de primera mano, acompáñame, permíteme mostrarte la luz, deslumbrarte.

Y luego nos llevamos la luz con nosotros, para una buena temporada, ¡ahora ya podemos deslumbrar! ¡Quemar los semáforos, fundir los neones, apagar los coches!